Las Constelaciones Familiares son una herramienta para acercarnos y entender mejor qué y por qué vivimos la vida que nos ha tocado.
Además, nos brinda la posibilidad de liberarnos de ciertos compromisos que hemos adquirido «gratuítamente» en esta vida, compromisos de afinidad, respeto y entrega a nuestro linaje familiar, que en muchas ocasiones, se convierten en compromisos «comprometedores» de nuestra salud emocional y física.
Graciela del Campo nos cuenta en este capítulo con más detalle, qué son las Constelaciones Familiares, cómo se practican y qué beneficios tienen.
Tienes esta entrevista en tu plataforma de podcast preferido y en YouTube:
Miguel de INversiónate entrevista a Venerable Lama Thubten Wangchen, representante de Casa Tibet en España, para hablar de budismo tibetano.
Thubten es conocido como el monje de la risa y de hecho, hace gala de su apodo en varias ocasiones durante la entrevista.
Con una calidad humana extraordinaria, Thubten comparte trucos sobre la meditación, estilo de vida tibetana para el día a día, e incluso, recita un mantra.
Además, este capítulo guarda una sorpresa añadida para el canal INversiónate: Es el primer capítulo que se sube a YouTube. aquí tienes el enlace por si quieres ver la entrevista:
Hace mucho tiempo, un huevo de águila real cayó accidentalmente en un corral. En ese lugar, una gallina lo encontró y lo acogió en su nido, incubándolo junto a sus propios huevos.
Con el paso del tiempo, un día, ese huevo de águila eclosionó junto a los demás huevos de la gallina, y una cría de águila real vio la luz entre los polluelos del corral. Esta pequeña águila creció en compañía de sus hermanos pollos, sin darse cuenta de su verdadera identidad.
Sin embargo, su destino cambió el día en que hizo un descubrimiento que transformó por completo su existencia.
En este capítulo, te contaré una historia en forma de cuento y metáfora que revela una creencia limitante que solemos llevar desde nuestro nacimiento.
La depresión es un TRASTORNO MENTAL, que nos invita a estar triste, abatido, melancólico, lejos de la felicidad, sumido en un bucle de pensamientos que se repiten incesantemente y sobre todo, es un estado basado en el PASADO, en algo que ya sucedió en la línea de tiempo de nuestra vida.
En muchas ocasiones le propusieron a Teresa de Calcuta que se uniera a una manifestación contra la guerra y ella siempre se negaba. Un día, le preguntaron por qué una persona como ella que amaba y representaba la paz, no se dignaba a presidir ninguna de aquellas manifestaciones y ella, con la firmeza que le caracterizaba contestó:
-El día que dejéis de manifestaros contra la guerra y lo hagáis por la paz, me uniré a vosotros-.
Patricia es una mujer común. Trabajadora, madre de dos niños, siempre simpática, activa y con una mente llena de proyectos… pero en esta vida que disfruta, ha tenido un encuentro con un cáncer, esa horrible enfermedad demonizada hasta el punto de no quererse pronunciar su nombre: Cáncer, pero Patricia, igual que Teresa de Calcuta, no lucha contra su enfermedad, sino que sale con ella a vivir cada día, compartiendo momentos con su familia, amistades y siendo una experiencia de amor por la vida que algunas personas “sanas” querrían para ellas.